LAS HUMANIDADES COMO CONCIENTIZACIÓN DE TÉCNICOS Y CIENTÍFICOS

LAS HUMANIDADES COMO CONCIENTIZACIÓN DE TÉCNICOS Y CIENTÍFICOS
INTRODUCCIÓN
El termino humanidades da lugar a muchas interpretaciones. Hay quienes toman a las humanidades como algo obsoleto, algunos que representan la tabla que salvará al hombre del naufragio y otros más que son el camino hacia el reposo espiritual.
Entre los griegos sólo se reconoció al hombre como el ser racional, esto es, al hombre libre. En la Edad Media las cosas no cambiaron. En el Renacimiento se empezaron a gestar esperanzas; son las que más tarde llevaron a la burguesía a tomar las riendas de la historia: todos los hombre son iguales, libres y hermanos.
La libertad, la igualdad y la fraternidad del hombre real, pronto se convirtió en promesa histórica. El humanismo renacentista se metamorfoseó en el individualismo más voraz e implacable; la burguesía quita a Dios el centro de atención humana, toma realmente al hombre como pretexto para endiosar al dinero. El capital es la flamante deidad creada para rendirle tributo, porque es la nueva arma desmedida de dominio.
En La situación de la clase obrera en Inglaterra, Federico Engels describe:
“Jamás he visto una clase tan profundamente desmoralizada, tan incurable corrompida por el egoísmo…tan incapacitada para cualquier progreso como la burguesía inglesa y con ello me refiero ante todo a la burguesía propiamente dicha…Para ella no hay nada en el mundo que no sea dinero…Al burgués le resulta totalmente indiferente si sus obreros mueren de hambre o no, con tal de que él gane dinero…”
“Para los industriales de todos los países era particularmente odiosa la constante injerencia del Estado en las actividades económicas de los particulares. Los capitalistas estaban persuadidos que ellos mismos hallarían la vía y los medios de incrementar sus riquezas…. El Estado no podía dirigir la actividad económica del país: en lugar de la intervención debería prosperar la libertad de empresa, la libre competencia. Así concebía la burguesía industrial. La burguesía estaba persuadida de que sus ventajas personales y su enriquecimiento coincidían plenamente con las ventajas de la sociedad”. Coincidencia que solo existía en el discurso burgués, porque la realidad desmentía tal afirmación.
El culto al dinero lo ha trastocado todo, al grado de que la humanidad entera tiembla, se arrodilla, se siente perder la vida poco a poco si los ministros de este culto se impacientan y amenazan a nombre de este dios que todo lo puede destruir.
Según testimonios Estados Unidos de Norteamérica proyecta construir 15 portaaviones Nimitz. Con el costo de solo 10 podría abrirse un programa durante 14 años para combatir el paludismo y evitar la muerte de más de catorce millones de niños africanos.
En 1985, según la FAO había en el mundo 575 millones de hambrientos. Su promedio calórico indispensable hubiera costado menos que 223 cohetes MX que serán empleados en Europa.
¿A qué se debe que, en lugar de alimentos, se produzcan armas para atemorizar y destruir al ser humano? ¿Por qué los que tiene bienes tratan de someter a los que tiene menos?
Esto pasa entre los individuos que comparten un territorio nacional, pero también ocurre entre los países. En los países ricos la gran mayoría de ciudadanos permanece indiferente, insensible ante el sufrimiento de los habitantes pobres. Los dirigentes prometen a sus ciudadanos un mejor nivel de vida; generalmente con el amedrentamiento de los pueblos débiles y subordinados que se atreven a intentar romper las relaciones de sometimiento que causan su pobreza.
En el mundo hay alimentos de sobra. De hecho, año tras año se producen en el mundo entero enorme contingentes de alimentos que no llegaran a ser utilizados…. Los alimentos que se producen anualmente en la actualidad son más que suficientes para alimentar a los seis billones de personas previstos para el año 2000.
Los grupos económicos no solamente controlan la distribución de los alimentos que producen, sino también tienen bajo su arbitrio la producción misma, de acuerdo a sus intereses. Una de las mejores maneras de mantener los precios altos y bajo control es comenzar por no producir alimentos.
Algunas veces se aduce que los pueblos que más hambre padecen con los más densamente poblados. Esto es falso; comparemos África con Europa. El primero tiene una densidad de población de 18 personas por km cuadrado; Europa presenta una media de 98 personas por km cuadrado. El hambre que África sufre avergüenza al mundo.
La causa del hambre no es la escases de los alimentos ni la escases de la tierra, lo que escasea en realidad es la democracia, esta democracia según la cual cada persona tiene derecho a disponer de alimentos suficientes.”
Esta injusticia y grandes desigualdades, tanto en el interior de los pueblos como entre los países, se trata de mantenerlas, ya sea por medio de la caridad, de mecanismos políticos o por la violencia.
Es muy común que se pretenda disimular el hambre y la pobreza por medio del manipuleo de masas, y cuando este recurso falla, es usual que se opte por la violencia. Cuando los gobiernos pierden control caen o la violencia se internacionaliza; lo segundo es lo más común, trata de atacar con armamento y el negocio bélico se vuelve muy lucrativo.
Se generan gastos enormes en cuanto a armamento y al final el que termina pagando esto, es el propio ciudadano y las deudas que otros países tengan contraídas con el país en guerra. El desarrollo armamentista responde al afán de dominio político y económico, y es por ello que la ciencia ha tenido un papel fundamental. Es por eso que no faltan personas que culpan el gran avance tecnológico como causa de la violencia.
El progreso de la ciencia ha traído la capacidad de comprender las situaciones sociales y también los medios para resolver los problemas prácticos de la transición, a través de la organización social consciente.
El propósito es velar la realidad de un sistema social injusto, ya sea enjuiciando y condenando a la ciencia o refugiándose en los perjuicios nacidos y robustecidos en la ideología burguesa: el confundir la paz con el conformismo, la libertad con la voluntad del que más puede; la superioridad congénita de la clase dominante y en el caso de no aceptar las falsedades anteriores, callarse y llevar el pensamiento al mundo de la irrealidad.
La burguesía pretende poner todo a su servicio: la religión, la ciencia y al hombre mismo. La religión, por su intrínseco carácter falseado de la realidad y su accesible divulgación.
La ciencia no tiene una trayectoria propia e independiente del sistema que la propicia; pronto la burguesía la pone a su favor; solo patrocinara el desarrollo de aquellos aspectos que le reditúen ganancias que la legitimen como clase dominante.
Al hombre se le ha puesto al servicio del poder económico. No puede ser de otra manera: la producción, la distribución, el intercambio y el consumo de la riqueza están dirigidos por unos cuentos que ponen, por encima de la humanidad entera, sus propios intereses de grupo.
Para conocer al hombre y sus problemas en necesario acudir a los últimos resultados de las ciencias sociales. ¿Para qué conocer al hombre? ¿Tal vez para satisfacer nuestra simple curiosidad? NO. La forma de existir del hombre es la transformación, y esta transformación no es un simple deporte sino una respuesta a necesidades muy concretas. La transformación y esta transformación no son un simple deporte sino una respuesta a necesidades concretas. La transformación humana es consciente, al transformas persigue fines que no son deducidos directamente del conocimiento científico sino que derivan de la concepción que se tenga del mundo y del hombre mismo.
Aquí está la función que las humanidades deben desempeñar. A partir del conocimiento científico del hombre y de la naturaleza, así como aportaciones de la filosofía científica, las humanidades se deben contribuir a la determinación del sentido de la vida humana en la Tierra. Si se inspira en un conocimiento objetivo, será más consiente, más racional, con metas inmediatas y mediatas más claras y no creemos que en estas condiciones se escoja como fin la autodestrucción humana.
Las humanidades solo tiene sentido cuando armonizan con los resultados científicos y filosóficos; los científicos y técnicos no deben crecer de una formación integral, asi como los humanistas se deshumanizarían si en sus conjeturas se desentendieran de la información científica actual.
EL objetivo es que tanto científicos como técnicos tengan una visión objetiva del mundo y del hombre, de modo que esto les permita entender y asumir una responsabilidad en los avanzes o retrocesos de la sociedad en que vive.
Sostenemos que el objetivo principal de las humanidades es el hombre, visto este no en una forma abstracta, aislada, parcial, sino como un ser práctico, social e histórico. No se puede abordar correctamente los problemas humanos si no se tiene una clara concepción del mundo y del hombre.
LO QUE LAS HUMANIDADES NO SON
Al introducir humanidades en la formación te técnicos y científicos se despertaron ciertas actitudes entre alumnos y maestros.
Las humanidades deben convertirse en un elemento circunstancial de los planes de estudio en las escuelas de técnicos y científicos. Para ello debe haber una amplia difusión del contenido y objetivos de esta disciplina.
No deben ser tomadas tan a la ligera que solo sirvan para elevar el promedio. Se trata de partir de un programa bien definido y ubicado en los objetivos de la educación técnica y científica y llevarlo con el debido rigor teórico - metodológico.
Las humanidades no deben tener como función mediatizar al estudiante, es decir, influir a este para que actuara siempre acorde a la versión que le den de la realidad. Las humanidades no deben servir para condicionar conductas, sino para poner las bases de acciones conscientes.
Uno de los principales objetivos de las humanidades, en su perspectiva actual, es contribuir a la conquista de un futuro social más armonioso; esta contribución se vuelve ficticia si con las humanidades se procura respaldar procedimientos que ocultan los cambios sociales que propicien verdaderamente una mayor armonía entre los hombres.
En un curso de humanidades no se trata de cultivar una actitud contemplativa frente al arte sino de aprender a valorarlo, saber interpretar sus formas expresivas para entender su contenido social, de modo que al leer Los de abajo nos unamos a sus personajes con ellos a uno de los más trágicos resultados de la Revolución Mexicana.
En humanidades trata de enriquecer nuestra conciencia sobre los problemas del hombre y, en este caso, entender que el arte, además del goce estético que por naturaleza expresiva provoca uno de los más inmediatos accesos al conocimiento de estos problemas. No se trata de propugnar el arte sino de entender la función social que el arte desempeña.
COMO SURGIERON LAS HUMANIDADES
El termino humanidades fue empleado por Marco Tulio Cicerón para denominar a la educación liberal o literaria.
Los italianos llamaban umanista al maestro de humanidades, al que se dedicaba a los studia bumanitais, esto es, al estudio de hombre en cuanto a ser humano.
El humanista no era considerado como un especialista. Para estudiar al hombre tenía que dedicarse al estudio de la historia, la poesía, la retórica, la gramática y la filosofía moral. Todas estas disciplinas construían un conjunto armónico y no una suma de especialidades como se consideran actualmente. La suma de estas disciplinas era lo que conducía al conocimiento de la verdadera condición del hombre.
El termino humanidades nos lo envía Cicerón, es en el Renacimiento donde el concepto se enriquece verdaderamente. Renacimiento es el movimiento filosófico, artístico y literario que nace en Italia a finales del siglo XIV y se extiende por toda Europa durante los siglos XV y XVI. Algunos autores coinciden en la conclusión de que el termino renacimiento se gesta en una mentalidad religiosa. Esté movimiento se interpone a la cultura medieval. Las estructuras económicas e ideológicas ya no son fuertes para contener la renovación moral y política que se inspira en los clásicos griegos.
El Aristóteles recortado a la medida de la concepción medieval resulta ya una armadura sumamente estrecha y endeble, incapaz de resistir a los humanistas como Petrarca, Erasmo de Rotterdam y muchos más.
Petrarca no niega los méritos de Aristóteles pero arremete contra “esos aristotélicos estúpidos que le meten en todas sus conversaciones, hasta fastidiarle a él tanto como a sus oyentes, tergiversan el sentido de sus escritos”. “Sé que en sus libros hay mucho que aprender, pero creo que también se puede aprender en otras partes, al menos hubo otros sabios tan ilustres como él”.
¿A qué se debe que Aristóteles resulta mal parado cuando Petrarca lo compara no solo con los mencionados predecesores sino con los mismos latinos? Su estilo y método no es grato al gusto renacentista.
Los estímulos que en Aristóteles faltan Petrarca los encuentra en los latinos, especialmente pues este tiene un método que hace que cualquier persona ame y entienda su filosofía.
Lo anterior no es el exclusivo sentir de Petrarca sino de la mayor parte de los humanistas del Renacimiento.
El humanismo renacentista no es un movimiento antiintelectualista; su exigencia es que se humanice el intelecto humano., que la capacidad intelectual se ponga al servicio del hombre terrenal, a favor del hombre que no tenga que esperar la muerte para ser feliz. La tierra es el escenario de la vida humana; es en este escenario donde la vida tiene que disfrutarse y sufrirse plenamente. El conocimiento humano no se trata de saber cosas para repetirlas sin analizarlas, sin darle sentido, sino de asimilarlas para que pasen a formar parte de nuestra manera de pensar y de ser. Llenar la cabeza de datos no es aprender.
Las humanidades se rebelan contra el conocimiento buscando como conocimiento mismo. Para ellos el conocimiento tiene sentido en cuanto responde a una necesidad intima del hombre.
Las humanidades desde que nacieron tuvieron un objetivo fundamental: el conocimiento del hombre. En el Renacimiento se acentúa esta urgencia, también se hizo en las antiguas Grecia y Roma.
Las humanidades surgen en Grecia con el nombre de Paideta. En el Renacimiento resurgen como una necesidad largamente contenida, con la pretensión de comprender todo lo humano, no solo a través de la ciencia y la filosofía sino tratando de entender el arte. Las humanidades tratan de explicar estas manifestaciones para llegar al hombre.
Nosotros pensamos que el hombre es tal precisamente porque es un ser social y que las ciencias que estudian al hombre lo estudian a partir de la sociedad y estas ciencias son ciencias sociales.
Las ciencias sociales tienen como objeto la explicación de hechos. Los hechos que pretenden explicar es la sociedad.
Las ciencias naturales explican hechos. Se diferencian de las ciencias sociales por el contenido y por el método.
Por otra parte tenemos a la filosofía que se ha propuesto resolver tres problemas: Una concepción del universo, una concepción general del hombre y como el hombre conoce al universo.
Las humanidades no deben ser tomadas como un conjunto de ciencias sociales, sino como una disciplina con objetivos y contenidos propios. Su objetivo general es llegar a conocer cada vez más al hombre, para que este sea consciente de su papel como individuo humano en la tierra. En cuanto a contenido se considera que las humanidades deben comprender el conocimiento del pasado del hombre.
El estudio del hombre se debe hacer con rigor científico, lo que no significa que tengamos que atenernos únicamente a la información que las ciencias nos brindan. Para llegar a un conocimiento más profundo debemos aprovechar todos los caminos que nos llevan a este conocimiento. Además del conocimiento científico debemos conocer el arte, sistemas religioso, políticos, jurídicos, morales, y todo esto puede llevarnos a conocer al hombre en sus diversas manifestaciones, desde tiempos más remotos hasta el tiempo actual.




CONCLUSIONES:


• Las humanidades se llegan a confundir con otras ciencias que la única función que tiene dentro de las humanidades es brindar información para tener una mayor profundización en el estudio del hombre.
• Las humanidades surgieron en Grecia y ha ido recibiendo transformaciones de acuerdo al periodo en el que se encuentra.
• Actualmente son necesarias las humanidades para que el ser humano viva de una mejor manera, que sea feliz en la tierra y compartir con todos el conocimiento.
• El conocimiento únicamente es verdadero cuando lo analizado se pone en práctica y no únicamente queda como un almacén de información dentro del cerebro, debemos comprenderlo para que sea funcional en nuestra vida diaria.
• Los modos de producción han tenido una gran influencia en la deshumanización debido a que se busca generar riqueza sin tomar en cuenta las dolencias por las que atraviesa el ser humano y únicamente lo importante es ganar más y más dinero sin importar el mundo.
• Las humanidades hoy en día son parte fundamental de la formación de científicos debido a que se pretende que el conocimiento generado sea compartido y generar un bien, no solo para el propio científico sino también para la sociedad con la convive.
• Las humanidades usan varias ramas de la ciencia para poder llegar a un cocimiento más exacto acerca del hombre dentro de sus diversas manifestaciones.